Combatir la ansiedad con ejercicio físico

El verano va quedando atrás. Se fueron las tardes interminables de sol, las juntadas al aire libre y llegaron los días frescos. Ahora, con la llegada del otoño, retomaste la rutina laboral, los chicos volvieron al colegio y el ritmo diario se acelera otra vez. Y con eso, es posible que la ansiedad y el estrés empiecen a hacerse sentir. Pero tranqui, hay una solución efectiva para mantenerlos a raya: el ejercicio físico. En Fitness Life te contamos por qué es tu mejor aliado para afrontar esta nueva temporada con energía y bienestar.

Otoño, rutina y ansiedad: ¿Qué tienen en común?

El cambio de estación suele venir con algunos desajustes. Los días se acortan, el frío empieza a asomar y la rutina se vuelve más exigente. Si sentís que la cabeza te va a mil, que dormís mal o que te cuesta encontrar motivación, no estás solo. La ansiedad es una respuesta natural del cuerpo ante situaciones que percibimos como demandantes. Sin embargo, cuando esa tensión no se libera, puede convertirse en un problema.

Acá es donde el ejercicio entra en juego. Mover el cuerpo no solo mejora tu estado físico, sino que también es una herramienta clave para equilibrar la mente y reducir el estrés.

La ciencia lo confirma: el deporte te ayuda a combatir la ansiedad

Los estudios lo respaldan: hacer actividad física con regularidad libera endorfinas, también conocidas como las «hormonas de la felicidad». Estas sustancias generan una sensación de placer y bienestar, disminuyendo el estrés y la angustia. Además, el ejercicio mejora la calidad del sueño, aumenta la autoestima y ayuda a enfocarte mejor en tus tareas diarias.

Por otro lado, la actividad física aeróbica, como correr, nadar o andar en bicicleta, es especialmente efectiva para aliviar los síntomas de ansiedad. Incluso algo tan simple como una caminata en la cinta puede ser tan beneficioso como una sesión de gimnasia intensa.

Potencia tus Isquiotibiales y Eleva tu Rendimiento Si quieres unas piernas fuertes, definidas y a prueba de todo, hay un grupo muscular que no puedes olvidar: los isquiotibiales. Estos músculos, situados en la parte posterior del muslo, son clave para potenciar tu fuerza, evitar lesiones y mejorar tu rendimiento en cualquier disciplina deportiva. No se trata solo de estética (aunque también ayudan a conseguir unas piernas más tonificadas), sino de funcionalidad. Fortalecer los isquiotibiales te hará más rápido, más ágil y reducirá el impacto en la columna y caderas cuando entrenas intensamente. ¿Te imaginas mejorar tu capacidad de salto, correr con más potencia o evitar dolores en la zona lumbar? Todo esto es posible si trabajas bien esta zona. Ejercicios Clave para Isquiotibiales Fuertes Aquí te dejamos una rutina con ejercicios específicos que te ayudarán a fortalecerlos y mejorar tu movilidad. 1. Curl femoral con gomas elásticas Es un ejercicio ideal para activar los isquiotibiales con resistencia progresiva. ✅ Cómo hacerlo: Coloca una goma elástica alrededor de los tobillos y túmbate boca abajo. Flexiona las rodillas sin levantar la pelvis del suelo. Realiza 10 repeticiones por serie y haz 2 series. 2. Peso muerto con piernas rígidas y kettlebell Perfecto para trabajar no solo isquiotibiales, sino también glúteos. ✅ Cómo hacerlo: De pie, con una pesa rusa en cada mano, mantén la espalda recta y baja la pesa flexionando ligeramente las rodillas. Siente el estiramiento en la parte posterior del muslo y regresa a la posición inicial. Realiza 2 series de 25 repeticiones con 1 minuto de descanso. 3. Curl femoral con fitball Este ejercicio no solo fortalece, sino que mejora la flexibilidad. ✅ Cómo hacerlo: Tumbado boca arriba, apoya los pies sobre un fitball. Eleva la cadera y flexiona una pierna a la vez. Realiza 2 series de 10 repeticiones. 4. Hip thrust con una pierna Potencia tus isquiotibiales y glúteos con este ejercicio unilateral. ✅ Cómo hacerlo: Tumbado boca arriba, flexiona una rodilla y eleva la cadera. Mantén la postura unos segundos y regresa lentamente. Haz 3-4 series de 18 repeticiones por pierna. 5. Curl nórdico Uno de los ejercicios más exigentes, pero también más efectivos. ✅ Cómo hacerlo: Apoya los pies en un soporte fijo y baja lentamente hacia el suelo. Usa las manos para impulsarte de nuevo. Haz 2 series de 15 repeticiones. 6. Correr en pendiente Para un entrenamiento funcional, nada como correr en inclinación. ✅ Cómo hacerlo: Corre cuesta arriba a máxima intensidad durante 1 minuto y descansa otro. Repite 5 veces. 7. Peso muerto rumano andando Si buscas un reto extra, este ejercicio es ideal. ✅ Cómo hacerlo: Sujeta una mancuerna en cada mano, da un paso adelante e inclínate hacia el suelo. Realiza 15 repeticiones y, cuando te sientas preparado, sube a 2 series. 💡 Consejo Extra: No olvides estirar bien después de cada sesión para evitar molestias y mejorar tu movilidad. Conclusión Incluir estos ejercicios en tu rutina una o dos veces por semana te dará piernas más fuertes, flexibles y resistentes. ¡Empieza hoy y siente la diferencia en cada paso!

La clave está en elegir una actividad que disfrutes, porque si algo te aburre, lo más probable es que lo abandones rápido. Si sos de los que prefieren entrenar bajo techo, el gimnasio te ofrece una gran variedad de opciones: desde musculación hasta clases de baile, yoga o entrenamiento funcional. Además, rodearte de gente con objetivos similares puede ser una motivación extra para mantener la constancia.

Si te gusta entrenar al aire libre, el otoño también tiene lo suyo: correr en un parque, hacer trekking, andar en bicicleta o practicar deportes en equipo son opciones excelentes para mantenerte activo mientras disfrutás del cambio de estación.

Tips para entrenar sin excusas

Sabemos que con el frío y la rutina puede costar mantener la constancia. Por eso, te dejamos algunos consejos para que el ejercicio se convierta en un hábito:

  1. Fijate un horario: Planificá tus entrenamientos como si fueran reuniones de trabajo. Asignales un lugar en tu agenda y respetalos.
  2. Arrancá de a poco: Si hace tiempo que no te movés, empezá con sesiones cortas y de baja intensidad. Lo importante es ser constante.
  3. Buscá compañía: Entrenar con un amigo o en grupo puede ser una gran motivación para no abandonar.
  4. Probá distintas actividades: No te quedes solo con una opción. Explorá nuevas disciplinas hasta encontrar la que más te motive.
  5. Disfrutá el proceso: No te obsesiones con los resultados inmediatos. Hacer ejercicio es un camino, no un destino.

Entrenamientos específicos para reducir la ansiedad

Dependiendo de cómo te sientas, podés optar por distintos tipos de entrenamiento:

Para relajar la mente y el cuerpo: Yoga, pilates o estiramientos son ideales para reducir la tensión y mejorar la concentración.

Para liberar energía y tensión: Kick-boxing, HIIT o entrenamiento de fuerza son excelentes para descargar el estrés acumulado.

Para mejorar el estado de ánimo: Correr, nadar o andar en bicicleta aumentan la resistencia y generan una sensación de bienestar duradera.

La ansiedad y el estrés no tienen por qué apoderarse de vos en esta nueva etapa del año. Incorporar el ejercicio físico en tu rutina diaria puede marcar una gran diferencia en cómo te sentís y en cómo enfrentás los desafíos del otoño.

En Fitness Life, te ayudamos a encontrar la mejor versión de vos mismo, con entrenamientos adaptados a tus necesidades y un ambiente que te motiva a superarte. ¡No dejes que la ansiedad tome el control, ponete en movimiento y viví un otoño con energía y bienestar!